Nexus, primer taxi volador llegará en cuatro años. La empresa Bell ha sido siempre sinónimo de aeronaves, en especial helicópteros. Ahora, Bell quiere subirse al futuro del transporte aéreo con una visión ambiciosa.
Nexus es un taxi volador capaz de despegar y aterrizar de forma vertical. Ya en vuelo, los rotores giran para darle impulso. A bordo. Nexus lleva un piloto y cuatro pasajeros
A la par con los aparatos, debe surgir una regulación que los haga seguros. Por eso, en este prototipo está el trabajo de firmas de aviación, ingeniería e informática como Safran (que desarrolló el sistema de propulsión híbrido), EPS ( se encargó de las baterías), Thales (hardware y software) y Moog (sistema de control de vuelo).
La meta de Bell es que el taxi volador, que pesa casi 3 toneladas, pueda volar cerca de 250 kilómetros en una hora. Si se cumplen los plazos estimados, las pruebas comenzarían en 2023.
Para usar esta clase de vehículo en las ciudades modernas será necesario construir docenas de aeropuertos especializados en naves eléctricas de despegue vertical.
Uber dice que podría construirlos encima de los parqueaderos actuales y usaría tecnología en automatización para coordinar unos cien aterrizajes por hora. En el futuro, los aeropuertos serían edificios, capaces de cargar una nave en cuatro minutos y medio y manejar mil aterrizajes por hora.